CCOO no hemos firmado ninguna paz social y entendemos que no nos debemos quedar callados ni parados ante esta pérdida de derechos que no lleva aparejada la más mínima contraprestación.
En los protocolos que se publicaron ayer ya pudimos ver como se habla de que deben poner objetivos y hacer una evaluación del desempeño, de que debe vigilarse en qué puestos de trabajo se producen los atascos, de que se repartirá entre el resto el trabajo de la persona que no esté, de que se debe controlar la evolución de la productividad del personal y hacer un cálculo individual de tiempo medio por funcionarios en la resolución de peticiones, como si esto fuera la Ford, de que te pueden poner a trabajar en un grupo de trabajo, en varios a la vez o cambiarte de grupo cuando lo consideren … y eso sólo como aperitivo.
Porque la pretensión que se puede ver de trasfondo es abaratar costes a base de los costes de personal. Mismo, o más trabajo, con el menor personal posible y al menor coste posible
Y todo ello a coste 0 para la administración, que tiene la poca vergüenza de querer colaboración pero sin la subida a la media nacional que tan justamente pedimos.
Porque el
único coste que va a tener esta modificación de todo nuestro sistema de trabajo
va a ser el de nuestra salud, física y mental y eso no lo podemos consentir.