Ante la grandísima tragedia provocada por las lluvias torrenciales e inundaciones en diferentes lugares del país desde hace días, y con un mayor impacto en la provincia de Valencia, la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO (FSC-CCOO) transmite todo el apoyo y solidaridad a las personas que están sufriendo esta catástrofe humanitaria sin precedentes.
En primer lugar, desde FSC-CCOO damos nuestro más sentido pésame a todas las familias de las, hasta este domingo, más de 200 personas fallecidas que se ha llevado por delante este desastre medioambiental. Asimismo, consideramos necesario priorizar la labor de búsqueda de las personas desaparecidas. FSC-CCOO se solidariza también con todas las personas que han visto cómo su vida ha cambiado de un día para otro y lo han perdido todo: viviendas, infraestructuras, la posibilidad del acceso a suministros, la cobertura de las necesidades básicas. No hay palabras para tanto dolor.
Esta tragedia, la mayor catástrofe natural de la historia reciente de España, ha dejado y va a dejar una profunda huella en nuestra sociedad. Por ello, desde FSC-CCOO hacemos llegar nuestra solidaridad a las comunidades afectadas y ponemos en valor la entrega y profesionalidad de los servicios públicos de emergencia, la mayoría perteneciente a nuestra federación (bomberos/as, fuerzas y cuerpos de seguridad), y del resto de personas trabajadoras de nuestros sectores federales que han estado en la primera línea de atención a la ciudadanía y que han desempeñado y desempeñarán un papel esencial en un momento tan dramático.
- Unos servicios públicos fuertes y con recursos suficientes, la mejor protección a la ciudadanía, más aún ante catástrofes derivadas del cambio climático
En una situación tan dramática como la ocurrida resaltamos, más que nunca, la importancia de contar con unos servicios públicos sólidos y con los recursos necesarios. Los servicios públicos, los impuestos que los sostienen y las políticas que se implementan para que sean viables y de calidad, son esenciales y esta crisis demuestra que su papel es fundamental para salvar vidas y tener una red sólida de protección a la ciudadanía.
Debilitar los servicios públicos es debilitar la capacidad de intervención del Estado en general y, en definitiva, desproteger a la ciudadanía. Tal y como quedó patente en la crisis de la covid-19, solo a través de unos servicios públicos fuertes, eficaces y eficientes es posible garantizar las necesidades básicas de la ciudadanía en general, pero sobre todo en situaciones extremas.
Ni las modernas herramientas para realizar las previsiones científicas de las catástrofes naturales, crecientes como consecuencia del cambio climático, ni el irresponsable negacionismo ideológico de éste, pueden justificar los recortes de los servicios públicos, ni postergar por más tiempo el debate sobre la actualización y refuerzo de los protocolos y medidas preventiva actuales, claramente insuficientes.
- Medidas económicas y apoyo a las personas trabajadoras
FSC-CCOO considera imprescindible poner todo el empeño en evitar un colapso económico. Para ello, es esencial que tanto la Generalitat Valenciana como el Gobierno central pongan sobre la mesa ayudas excepcionales, enfocadas especialmente a proteger el empleo y los ingresos de todas las personas trabajadoras. Para ello, es necesario que se aprueben expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por fuerza mayor, con los complementos salariales necesarios para evitar que la situación empeore aún más para las personas afectadas.
- Protección laboral en las zonas afectadas
La seguridad y la salud de los millones de personas trabajadoras de los sectores que componen nuestra federación (administraciones públicas, intervención social, transporte ferroviario, marítimo, aéreo y por carretera, telecomunicaciones, medios de comunicación, empresas del ciclo integral del agua, postal y gráficas y papel) es una prioridad. La Ley de Prevención de Riesgos Laborales y el Real Decreto-ley 4/2023 exigen que las empresas adopten medidas preventivas en caso de fenómenos meteorológicos adversos. Las miles de empresas de nuestro ámbito federal deben garantizar que ninguna persona trabajadora esté expuesta a riesgos innecesarios. La claridad del Ministerio de Trabajo en los supuestos que eximen a las personas trabajadoras de acudir a sus puestos de trabajo sin pérdida retributiva es una pauta que seguir por las instituciones y el empresariado.
- Evaluación, mejora de infraestructuras y prevención
Una vez controlada la emergencia, y a eso se deben destinar en estos momentos los mayores esfuerzos, será necesario analizar y evaluar lo ocurrido para identificar fallos y reforzar los mecanismos de respuesta ante fenómenos que se van a repetir con más frecuencia e intensidad, como consecuencia del innegable cambio climático, por mucho que el negacionismo ideológico se empeñe en contradecir la realidad. Recuperar las infraestructuras dañadas es fundamental para restablecer la normalidad y prepararnos mejor ante futuros desastres. FSC-CCOO insta al Gobierno valenciano y al Gobierno central a que lleven a cabo este ejercicio de responsabilidad e implementen las medidas necesarias para mejorar nuestra capacidad de prevención y de respuesta, así como para evitar futuras tragedias como la que estamos viviendo.
- Respeto, altura de miras y unidad ante la tragedia
Finalmente, FSC-CCOO pide a las y los representantes políticos altura de miras. En estos momentos de dolor es crucial que instituciones, empresas, personas trabajadoras y ciudadanía trabajemos juntas, de forma coordinada, para reconstruir y apoyar a la población afectada, y confiamos en que tanto el Gobierno central como el de las Comunidades Autónomas concernidas, especialmente la Generalitat Valenciana, respondan a esta emergencia con el compromiso y la responsabilidad que la ciudadanía merece.
Nuestra federación, FSC-CCOO, como ya lo hizo en la pandemia, impulsará en esta emergencia las iniciativas de asesoramiento, información y atención, tanto presencial como virtual y telefónica, a su alcance para brindar apoyo a las personas trabajadoras y a la ciudadanía de las zonas afectadas.
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